Valor venal de un coche

Valor venal del coche. Seguro que has escuchado en alguna ocasión esa frase: valor venal del coche. Pero, ¿qué es eso de valor venal del coche? El valor venal del coche es lo que usan las aseguradoras para conocer los riesgos, calcular los plazos de la póliza y conocer lo que tendrá que abonar en caso de siniestro. Lo usan también los compra-venta de coches profesionales y por supuesto, lo emplea Hacienda. 

El valor venal de un coche no es lo mismo que en valor de mercado y además, existe otra clase de valor venal que usan algunas aseguradoras, que es el valor venal mejorado. Conviene conocer todos estos detalles para que no nos cuelen un gol porque nos falta información y encima, tampoco nos hemos molestado en informarnos debidamente. Así, por tanto, ¿Qué es el valor venal de un coche? 

Valor venal de un coche, ¿Qué es?

Por lo general, según explican los expertos, el valor venal de un coche es el valor que tenía ese coche en el momento anterior a producirse el siniestro, es decir, el valor que tenía para su venta. Por supuesto, ese valor venal se verá afectado por la marca, el modelo, la versión y la antigüedad (basada en la fecha de la primera matriculación). Esta forma de valorar un coche no tiene en cuenta ni el kilometraje ni el mantenimiento. 

El valor venal de un coche, por lo general, va descendiendo según pasan los años y se aplica para cubrir cosas como el robo, incendio, siniestros, para calcular los impuestos y también, en ocasiones, para conocer su precio de venta de segunda mano. Los usuarios particulares no usan este valor, porque como se ha comentado, no tiene en cuenta cuestiones como el kilometraje, el estado general del vehículo o el mantenimiento, cosas que afectan notablemente al valor final que pagará una persona por el coche. 

¿Cómo se calcula el valor venal de un coche? 

Para calcular el valor venal de un coche, hay que basarse, en primera instancia, en el valor oficial de un coche, un valor que establece Hacienda y que se publica en el BOE (Boletín Oficial del Estado). Es un valor que se basa en las características del vehículo y que se emplea como referencia en tasaciones, indemnizaciones, peritajes… incluso los compra-venta usan, en ocasiones, el valor venal para sus tasaciones, aunque siempre como punto de partida y no como valoración final. 

El valor venal es algo que usan mayoritariamente las aseguradoras, aplicando un porcentaje de reducción en función del año de matriculación siguiendo la tabla siguiente. 

• Hasta 1 año de uso: 100% de valor venal. 

• Más de un año, hasta dos años: 84% de valor venal

• Más de dos años, hasta tres años: 67% del valor venal

• Más de tres años, hasta cuatro años: 56% de valor venal

• Más de cuatro años, hasta cinco años: 47% de valor venal

• Más de cinco años, hasta seis años: 39% de valor venal

• Más de seis años, hasta siete: 34% de valor venal

• Más de siete años, hasta ocho años: 28% de valor venal

• Más de ocho años, hasta nueve años: 24% de valor venal

• Más de nueve años, hasta 10 años: 19% de valor venal

• Más de 10 años, hasta 11 años: 17% de valor venal

• Más de 11 años, hasta 12 años: 13% de valor venal

• Más de 12 años: 10% de valor venal

Es fácil entender que cuanto más antiguo es un coche, menor es su valor. Esto, por ejemplo, provoca que en ocasiones se declare un coche como siniestro total (el coste de la reparación supera el valor venal del vehículo), aunque este pueda seguir circulando perfectamente. Puede ocurrir, por mencionar un caso, por un golpe que daña una puerta en un coche con más de 15 años. El coche puede circular, solo hay una puerta dañada, pero el coste de la reparación supera el valor venal del vehículo. 

¿Qué es el valor venal mejorado? 

Algunas aseguradoras, para llamar la atención de más clientes y ofrecer un mejor servicio, tienen lo que llaman “valor venal mejorado”. Básicamente, se trata de una valoración al alza, es decir, que la aseguradora tendrá una pequeña deferencia con su cliente sumando algo de valor al valor venal del vehículo. Esto se realiza teniendo en cuenta los precios y la situación del mercado de ocasión en el momento que ocurra el percance.