Cómo saber saber si estamos ante un cuentakilómetros trucado
Cuando vamos a comprar un coche de segunda mano, concretamente entre particulares, una de las dudas que a veces nos puede asaltar es si el cuentakilómetros del coche que vamos a adquirir no marca los datos reales o si estará trucado. Una práctica totalmente ilegal que supone una estafa para el comprador pero lamentablemente sencilla de hacer y más habitual de lo que pensamos. Lo que no es tan fácil es hacerlo y no dejar rastro.
Toda seguridad es poca cuando se trata de comprar un coche. Por eso en masportucoche os dejamos algunos consejos que recomendamos tener en cuenta para al menos, intentar detectar si el cuentakilómetros ha sido trucado:
Historial de reparaciones y la ITV: existe una falsa creencia que los talleres o concesionarios oficiales no pueden facilitar los datos de referencia de un vehículo a cualquiera que no sea propietario por la Ley de Protección de Datos. La Agencia de Protección de Datos sí puede facilitar los datos de un vehículo al no tratarse de datos personales, por lo que no están protegidos y se pueden solicitar para conocerlo. Siempre y cuando no nos den los datos personales del titular o propietario del coche, claro. Por eso, podemos acudir, matrícula en mano, tanto a la Jefatura de Tráfico (sabremos si ese coche tiene algún tipo de carga adicional o gravamen) como a la ITV, ya que estas empresas están obligadas a anotar los kilómetros registrados en el cuentakilómetros de un vehículo cada vez que éste pasa revisión. Además sabremos el nombre de la empresa de ITV que ha hecho la revisión a través del libro de mantenimiento o ficha técnica del vehículo.
Neumáticos: un pequeño detalle que podría darnos alguna pista, es comprobar si los neumáticos han sido cambiados hace poco. Lo más seguro es que ese vehículo cuente con más de 50.000 kilómetros. Si el cuentakilómetros marca menos, activa la alerta.
Con el odómetro en la mano, los datos podrían darnos pistas sobre si lo que marca el odómetro es real o no, algunos elementos que suelen cambiarse pasados unos determinados kilómetros son los siguientes:
Discos de freno delanteros: por norma general tienen una vida normal entre 80.000 y 100.000 km. Tal vez algo menos de vida si el vehículo es de cambio automático, por su menor freno motor.
Discos de freno traseros: un conductor normal no tendría por qué cambiar los discos traseros de su coche si no ha superado los 150.000 kilómetros.
Correa de auxiliares: ten en cuenta que las correas auxiliares de un coche que mueven el alternador, el aire acondicionado, etc. Tienen una vida entre 80.000 y 100.000 kilómetros.
Lámparas de xenón: Para cambiar las luces de un coche suelen tener que haber superado los 100.000 kilómetros, aproximadamente. Fácil de detectar que ha superado su vida si enciendes la luces del coche y un faro emite mucha más luz que el otro. Más que nada porque seguramente la lámpara de descarga de gas sea más nueva, simplemente.
El bloque silencioso de la suspensión: los brazos de suspensión, antivibratorios, estabilizadores, barras de dirección, etc. Van sujetos sobre piezas de goma. Con más de 200.000 km, esos dispositivos pierden holgura o se agrietan. Si los ves muy envejecidos, ese coche es bastante probable que supere los kilómetros que marca. Duda, razonablemente.
Por qué acudir a un taller oficial para revisarlo. Recomendación masportucoche
Lo cierto es que todos los fabricantes de vehículos conocen perfectamente en qué diferentes unidades de mano se registran los kilómetros, no sólo de forma visible (cuentakilómetros). Por lo que, además de tener en cuenta los puntos clave del vehículo mencionados anteriormente, la mejor recomendación que hacemos desde maspotucoche es que ante la duda, acudas a un servicio oficial. Y es que un servicio oficial además de conocer todos los protocolos de funcionamiento del sistema de un coche, cuenta con las herramientas e instrumentos especializados, capaces de leer cada unidad de control del vehículo. Ahí sí que no tendrás ninguna duda. En un taller oficial o especializado, pueden acceder al registro de las centralitas a través de un ordenador y podrán avisarte si el kilometraje ha sido alterado de la forma que sea y descubrir la estafa.
Igual te preguntas cómo puede resultar tan fácil para un taller oficial. Además de contar con los instrumentos apropiados para ello, son profesionales y rápidamente lo detectarán de la siguiente manera:
- Piezas de desgaste: las mencionamos anteriormente pero está claro que para un mecánico resultará muchísimo más sencillo revisar de forma rápida estos elementos y después comprobar que los resultados coinciden con lo que marca el cuentakilómetros. Sabrá con cuántos kilómetros cuentan algunas de estas piezas, como las pastillas y discos de freno, el sistema de escape…
- Bajos del vehículo: en un taller profesional podrán revisar desde las fugas de líquidos, secuelas de haber tenido algún accidente de tráfico, hasta el estado de los frenos, el tubo de escape, las suspensiones. Incluso pueden saber si se han usado piezas de desguace para sustituirlas por otras y así comprobar que los kilómetros corresponden a la realidad.
- Inspección y revisión a fondo: no pienses que llevar tu coche a un taller oficial o profesional especializado te va a salir por un ojo de la cara, todo lo contario, posiblemente ganes más y tu tranquilidad también. Una revisión de este tipo puede costarte uno 40€ y piensa en todos los disgustos que podrías ahorrarte. Merece la pena solicitar una revisión o inspección a fondo del vehículo, siempre antes de comprarlo, claro. En apenas unas horas, el taller podrá valorar el estado del vehículo y confirmarte de una vez por todas, si ha sido manipulado de alguna forma o lo que te ha dicho su vendedor no es del todo cierto.
Cuentakilómetros trucado… Al final, tú decides.
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