La cuarta generación del Ford Focus ya ha sido presentada. Un modelo muy importante para la compañía americana por su nivel de ventas; uno de los pilares de su estrategia de producto. Por eso, para su desarrollo se decidió empezar desde una hoja en blanco, creando un automóvil totalmente nuevo.
Su diseño es más aerodinámico, más elegante y también más deportivo. Ford ha cuidado cada detalle de este coche, para seguir siendo uno de los referentes. Además, con ese objetivo en mente, el nuevo Focus incorpora mucha tecnología destacando la conducción autónoma de nivel 2.
Una de las mayores novedades de la cuarta generación del Ford Focus, se centra en una nueva versión de tipo crossover, el Ford Focus Active (foto justo arriba). Este segmento, encuadrado dentro de los SUV, es uno de los que más ventas acumulan al año y la mejor forma de aprovecharse del tirón, es incorporar una versión de este tipo. La misma, luce paragolpes de nuevo diseño, protecciones de plástico negro, llantas específicas y una suspensión exclusiva con una altura al suelo con 30 mm adicionales, respecto a un Ford Focus normal.
A parte de esta nueva opción dentro de la gama, el nuevo Ford Focus se ofrecerá en acabado Trend, Titanium, Vignale, ST-Line y el Active. Sólo habrá dos carrocerías disponibles: cinco puertas y Wagon (familiar), dejando en exclusiva para el mercado chino un bonito sedán. La variante Vignale es la más lujosa, mientras que el ST-Line es el más deportivo.
El nuevo Ford Focus ofrece un habitáculo más grande que el anterior. A nivel de los hombros, las plazas delanteras aumentan su anchura en unos 20 mm, mientras que las traseras lo hacen en 80 mm. Las plazas traseras ganan también espacio para las piernas, en concreto, 50 mm. El diseño de los plásticos interiores es totalmente nuevo, con mayor calidad percibida y un equipamiento mucho más amplio. Podrá contar con cargador inalámbrico para teléfonos móviles. proyección de información tipo ‘head-up’ display y un asistente a maniobras evasivas (aumenta la asistencia de la dirección para favorecer un movimiento más rápido).
La lista de equipamiento interior incluye techo panorámico eléctrico, pantalla de manejo táctil de ocho pulgadas, lector de señales y el sistema MyKey (MiLlave en inglés) que permite configurar diversos apartados desde la misma para diferentes usuarios (límite de velocidad máxima, restricción de llamadas entrantes, posición de los asientos eléctricos…). No faltan los modos de conducción que modifican la respuesta del acelerador, la asistencia de la dirección, funcionamiento del programador de velocidad y la forma de actuar de la caja de cambios si la equipa. Los modos son Normal, Sport y ECO. Puede montar suspensión adaptativa con dos modos adicionales, Comfort y ECO-comfort.
Ofrecerá motores de gasolina y diésel. Los de gasolina parten del 1.0 EcoBoost y se ofrecen con 85, 100 y 125 CV. También se podrá optar al 1.5 EcoBoost con 150 y 182 CV. Los diésel emplean igualmente un motor para varias versiones, ofreciendo el 1.5 EcoBlue con 95 y 120 CV. El diésel más potente es el 2.0 EcoBlue con 150 CV. La caja de cambios es manual de seis relaciones de serie, pero los motores de gasolina de 100, 125 y 150 CV, así como los diésel de 120 y 150 CV, tienen en opción una caja de cambios automática de doble embrague.
Las primeras unidades comenzarán a llegar en el mes de julio de 2018, aunque todavía no hay precios.
Fotos del nuevo Ford Focus
