La Inspección Técnica de Vehículos, ITV, es un trámite que deben pasar todos y cada uno de los vehículos que circulan por las carreteras españolas. Su objetivo es comprobar que no sean un peligro para sus ocupantes y para el resto de usuarios de las vías públicas revisando una serie de apartados que vamos a pasar a relatar a continuación.
Antes de pasar la ITV, no obstante, hay que tener toda la documentación en regla ya que de no estarlo, no importa que el coche haya pasado la inspección de forma favorable, no tendrás el certificado de que la ITV es correcta, es más, ni siquiera podrás pasar la ITV.
Esta documentación que debes llevar es: la tarjeta de la ITV, el permiso de circulación y el recibo del seguro pagado.
Puntos a revisar en la ITV
Como hemos dicho, el objetivo de la ITV es certificar que nuestro vehículo es apto para circular por las vías públicas y que cumple la normativa ya sea en cuestiones de emisiones como de ruido.
Estas son las cosas que se comprueban en la ITV.
- Alumbrado. Es el fallo más común de todos y el que más resultados desfavorables provoca. Hay que revisar de vez en cuando que las luces del coche funcionen correctamente y lo deben hacer todas, incluso las antiniebla.
- Frenos. Un apartado vital que no todo el mundo cuida a pesar de ser un peligro máximo. Se debe revisar al menos una vez al año así como estar pendiente de ruidos o vibraciones.
- Suspensiones. Otro de los apartados que más resultados desfavorables crea. La suspensión se encarga no solo de hacer el coche cómodo, sino de evitar que la carrocería se mueva en exceso y además, importantísimo, que los neumáticos estén siempre en contacto con el suelo. Imprescindible revisar cada 20.000 km y cambiar en torno a los 80.000 ó 90.000 km.
- Neumáticos. Es el único elemento del coche que está en contacto con el suelo, así que su conservación y buen estado es imprescindible. Se deben revisar de vez en cuando y llevar siempre con las presiones correctas indicadas por el fabricante.
- Estado interior y exterior. Nadie se lo espera pero es posible que la ITV no se pueda pasar si el coche tiene muchos golpes en la carrocería o si, aunque sean pocos, pueden suponer un peligro para un peatón como puede ser golpes que hayan producido aristas. También se revisan la matrícula, los espejos retrovisores y los cinturones de seguridad.
- Emisiones y ruidos. Tienen una máquina especial que mide las emisiones del motor para comprobar si cumple con la normativa correspondiente (según año de matriculación) y en el caso de las motos, también se mira el ruido que emiten para que no supere un límite establecido.
También hay que saber cada cuanto tiempo se pasa, algo que no todo el mundo tiene claro. La primera inspección se debe pasar a los cuatro años de vida del coche. A partir de aquí y hasta los 10 años, se debe pasar la ITV cada dos años y posteriormente, una vez al año.