Hemos visto mil y una veces en las películas como los coches explotan a las mas minima, saltando por los aires a varios metros del suelo, esparciendo piezas y llamas hacia todos los lados y en definitiva y como se diría popularmente, liándola muy parda. Pero no se trata más que de ficción, un coche no explota como en las películas, si arden y de manera muy espectacular, pero no explotan ni saltan por los aires.
Cuando un coche sufre un incendio lo que se produce generalmente es una deflagración, una expansión de los gases muy rápida pero sin explosión, con unas llamas enormes y muy peligrosas. Es, salvando las distancias y a una escala mayor, como cuando abrías el gas para cocinar y al encender el fuego salía una llama enorme por el gas acumulado alrededor. Nunca veremos en la vida real un coche volar por los aires por una explosión a no ser claro, que sea por culpa de explosivos. Así la verdad es que vuelva por los aires cualquier cosa.