Hasta el día de hoy, los coches diésel eran la compra segura porque además de toda serie de ofertas, su reventa estaba asegurada con muy buenos valores. El modelo en cuestión y el motor han afectado como siempre, pero el hecho de ser un coche con motor diésel garantizaba la venta mucho antes respecto a uno de gasolina.
Los diésel han estado dominando el mercado durante muchos años, siendo la elección predilecta de los compradores por sus prestaciones y sus consumos. Eran algo más caros de adquirir y en ocasiones, más caros de mantener por su complejidad, pero al final más de la mitad de los conductores se decantaba por uno de ellos.